martes, 6 de mayo de 2008

Abraxas

"VII Sermones a los Muertos"


"Éste es un Dios del que vosotros nada sabíais, pues los hombres lo olvidaron. Nosotros le denominamos por su nombre: ABRAXAS
Es Fuerza, Duración, Transformación

Lo que Dios dice es vida.
Lo que dice el Diablo es muerte.
Abraxas, sin embargo, dice la palabra que es a la vez vida y muerte.
Abraxas produce verdad y mentira, bien y mal, luz y tinieblas en la misma palabra y en el mismo acto.

Por ello es Abraxas temible.
Es soberbio como el león en el instante en que vence a su víctima. Es bello como un día de primavera. Es la más clara luz del día y la más profunda noche.

Verle significa ceguera, conocerle significa enfermedad, rezarle significa muerte, temerle significa sabiduría, no oponerse a Él significa salvación.

Esto es el terrible Abraxas.
El Hombre queda paralizado ante su semblante.
Es la claridad y la sombra del hombre.
Es la realidad cambiante.





Los hombres, todos os volvéis iguales y vuestra esencia se mutila.


Por la voluntad del Hombre impera igualdad y no por la voluntad de Dios, pues las de los dioses son muchas; en cambio, las de los hombres son pocas.

Los dioses son poderosos y soportan su diversidad, pues, como las estrellas, están aislados y a una inmensa distancia entre sí. Los hombres son débiles y no soportan su diversidad, pues habitan casi juntos y necesitan la comunidad para poder soportar su carácter peculiar.

Cada uno debe orientarse a su lugar

Hombre y mujer se convierten en diablo cuando no separan sus caminos espirituales, pues la esencia es diferenciación.

La diferenciación conduce a ser único. El ser único se enfrenta a la comunidad. Pero, en virtud de la debilidad del hombre es necesaria la comunidad. Por ello sois tan sociales como es necesario. Os fuerzan a la comunidad. En la medida en que os fuerzan, la comunidad origina necesidad, más desgracia hay.
En la comunidad cada uno se clasifica por encima de otro.

En la comunidad rige abstención, en el estar solo rige disipación.
La comunidad es lo profundo, el aislamiento es la altura.
La medida correcta de comunidad purifica y clarifica.
La medida correcta de aislamiento purifica y complementa.
La comunidad nos da el calor, la soledad nos da la luz."

"Siete Sermones a los muertos"
Jung



Son diferentes fragmentos de los sermones que he puesto aquí a mi antojo. La verdad que la historia de este libro es curiosa: Jung sólo aceptó su autoría después de su muerte, con la publicación de sus memorias. Anteriormente, lo había publicado en privado y repartido sólo entre sus amigos íntimos. Lo firmó como Basílides,de Alejandría, "la ciudad donde el Este se topa con el Oeste".

Jung lo escribió, según relata él mismo, en una especie de escritura automática, como dictada desde el "otro mundo". Según dice, es un libro que se vio obligado a escrbibir por una aparición que se "lo dictó". Lo tituló en latín "Septem Sermones ad Mortuos"

A esta aparición la bautizó con el nombre de Filemón.Un anciano que se le aparecía y le hablaba, revelándole profundos secretos en el fondo de su propia alma. Llegó a dibujarle, y así se ha podido conocer su silueta en "El Libro Rojo", que redactó como diario de aquella época. (Es el arquetipo de anciano viejo y sabio, con larga barba blanca)

Los más curiosos fenómenos precedieron a la realización de la obra. La casa de Jung se llenó de ruido, el aire era tenso, como si estuviese lleno de presencias invisibles, sus hijos y el mismo tenían extraños sueños, la fatalidad parecía rondarles, acechando en los rincones. Todo lo cual no cesó hasta el momento mismo en que Jung dio fin a su libro.

(http://www.geocities.com/renacer_colombia/serrano/circulo/j11.htm)

No permitió, sin embargo, que se desvelase el significado del Anagrama presente al final del séptimo y último sermón:

NAHTRIHECCUNDE
GAHINNEVERAHTUNIN
ZEHGESSURKLACH
ZUNNUS

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